28/02/2009
Biografía de Padylla
Las Palmas de Gran Canaria. 21 de enero de 1976. Miércoles. 00:15….¡Buaaaa!... Nace Padylla, hijo de José Luis y Loly. De niño parece chino lo que atrae las suspicacias de su padre.
Algunos dicen que sus aptitudes para el dibujo están en su genoma al ser sobrino bisnieto del famoso pintor canario Nicolás Massieu y Matos. Otros explican su talento en su negación para el deporte, ya que mientras todos los niños jugaban con sus bicicletas, monopatines o balones, Padylla jugaba con la imaginación, un bolígrafo y papeles, cientos de papeles. Siempre autodidacta, en su infancia hacía unos dibujos extraños basados en las mascotas del programa Un, Dos, Tres (le apasionaba la Ruperta). Por otro lado, le encantaba copiar a los personajes de los maestros que admiraba y sigue admirando: Ibáñez, Escobar, Quino, Jan, etc.. Desde siempre e influenciado por sus maestros dibuja a todos sus personajes con ojos como si fueran huevos.
Durante su infancia y adolescencia no para de dibujar: en casa, en la playa y en el colegio. En el Colegio (Claret) gana algún que otro premio y los profesores y compañeros empiezan a llamarle por su apellido Padilla, lo que les da para hacer todo tipo de rimas de carácter gastronómico: tortilla, ensaladilla, empanadilla, etc. Él les responde caricaturizándoles.
Podía haber estudiado Bellas Artes, Publicidad, Periodismo, etc. pero por alguna extraña razón elige emprender una de las carreras menos creativas y más sosas del panorama universitario: Ingeniería Industrial. El verano del primer año de estos estudios, en lugar de estudiar para septiembre se dedica a dibujar un conjunto de viñetas motivado por la etapa política convulsa nacional (GAL, Roldán, etc.). Casualmente en esa época nace un nuevo proyecto periodístico llamado La Gaceta de Las Palmas. Su mejor amigo y el padre de éste, Blas y Alberto, le empujan a presentar su trabajo el cual gusta mucho a su director y a su redactor jefe, Jorge Batista y Juan Nicolás Cruz. De esa forma en octubre de 1995 sale publicada la primera viñeta firmada por Padylla (lo de la ‘y’ en lugar de la ‘i’ surgió por darle algo de glamour) que consiste en sacar al alcalde José Manuel Soria como fotocopia de José María Aznar. Es tanto el impacto que tiene el dibujo que ve en los temas locales y regionales un filón, siendo sus musos además del alcalde, el Presidente Hermoso y el entrenador de la UD Las Palmas Pacuco Rosales, el cual dice que lo saca muy gordo. Después de dos años, de acudir a la oficina del rotativo a dibujar todos los días y de hacer muchos amigos, cierra.
Flirtea con La Provincia un par de agostos en las páginas de verano y en la sección de Economía, hasta que en 1999 forma parte de otro nuevo proyecto llamado La Tribuna de Canarias dirigido por Federico González Ramírez. El tándem Román y Adán le da muchísimo juego hasta el 2001, año en el que el periódico cierra. Ya era el segundo, lo que le hace pensar que quizás es un poco gafe.
Tras un amago en las páginas deportivas del Canarias 7 y apunto de tirar la toalla (o la pluma), a principios de 2002 Martín J. Marrero y Manuel Almeida, viejos conocidos de los anteriores medios, lo llaman para la redefinición de un proyecto llamado La Gaceta de Canarias que sale junto al periódico El Mundo en el Archipiélago con una visión mediática regional, sueño totalmente compartido y ansiado por Padylla. En este medio se convierte en el azote gráfico de los gobiernos de Adán y de Paulino. Y como no podía ser de otra manera, a finales de 2008, éste también cierra. ¡Y van tres!
A punto de tirar la toalla (por el bien del mundo periodístico), a principios de 2009 Joaquín Catalán, antiguo director de La Gaceta y actual director de La Opinión de Tenerife, lo rescata para incorporarse a este periódico donde permanece con los dedos cruzados y tocando madera.
Cual superhéroe de cómic, trabaja por las mañanas en la Administración Pública bajo el nombre de José Luis, pero por las tardes se convierte en su álter ego Padylla plasmando la política, la inmigración, la economía, la ecología y la sociedad canaria en un papel. Aunque el tiempo que le resta es poco, ha realizado una serie de mascotas para el segmento infantil de La Caja de Canarias, colabora haciendo viñetas de carácter social para Cáritas de la Parroquia Corazón de María y actualiza un blog (www.padylla.com) en el que comenta sus viñetas y otras que le gustan. En 2006 cambió sus musos políticos por una única musa, Maru, su mujer y asesora con la que ha trabajado en un puñado de invitaciones para bodas.
Dicen de Padylla que es un poco friki y también un poco floppy. Tiene la convicción de que con el humor se puede cambiar el mundo y que seguirá luchando para que así sea.
Si quieres contactar con él para comentar sus viñetas, proponerle algo decente o simplemente para hablar sobre el sentido de la vida, mándale un correo.